Vigía de las Islas, poderoso guardián del Archipiélago Canario,casi tocas el cielo luminoso y hablas con Dios sin que haya intermedio.
Desciendes del Atlante esplendoroso que en tiempos sin reloj ni calendario pobló con siete islas, amoroso,el mar entonces gris y solitario.
Resto eres del tiempo y del pasado,y tus ojos de lava ennegrecidos han llorado con lágrimas de fuego.
Tu viejo corazón enamorado rescoldos sólo guarda, adormecidos.Te ha llegado la hora del sosiego.