domingo, 30 de diciembre de 2012


Los besos que tu me diste
los besos que yo te di,
¡Ay Dios mìo que tristeza!
no hay descanso para mi,
si yo pudiera olvidarme
de los besos que te di.


Fueron tus besos ardientes
como el fuego de un infierno,
que ahora yo siento que vivo
en un cruel y frìo invierno,
¡còmo poder regresar
y hacer nuestro amor eterno!


Tus palabras... tus caricias... tus besos,
còmo olvidar todo aquello?
si en mi vida entristecida
son el recuerdo màs bello,
darìa todo por un beso
y un rizo de tus cabellos.


Siento todavìa en mi boca
el mordisco de tus besos,
y esa tu pasiòn tan loca
mira que gran diferencia
mi pasiòn ahora es tan poca,
sòlo tu, sabìas mirarme
besarme y acariciarme.
¿Dime vida de mi vida,
còmo voy a conformarme?


Veinte años han pasado
y aùn me quemo en mi agonìa,
soñando con esos besos
que tu me diste un dìa,
y ahora son como puñales
que amargan la vida mìa.


Tal vez esos besos tuyos
los que no puedo olvidar,
a la hora de mi muerte
son los que han de salvar
a mi alma pecadora,
de arder en un fuego eterno
que por tus besos ahora,
arderìa en el averno.

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