miércoles, 23 de enero de 2019

Tengo que admitir que cada vez que vibra el móvil, lo busco rápidamente para comprobar si es un mensaje tuyo. No puedo evitar que se me escape un suspiro cuando veo tu nombre entre las notificaciones que hace un mes que no. A veces, incluso, se me hace un pequeño nudo en la garganta. Como una tonta, me espero un poco para que no pienses que he estado demasiado pendiente de ti. No me preguntes por qué lo hago, porque ni yo lo comprendo.
r

No hay comentarios:

Publicar un comentario